cuaderno de bitácora martes veintinueve de abril del 2025
No recuerdo cuando fue la última vez que tuve vacaciones. Fue mucho antes de mi primer matrimonio. Lo que tenía con mi querida amor eran escapadas de puro placer y disfrute. Y ayer leyendo a andrews eh he decidido que ya va siendo hora de despedirse por todo lo alto. He vendido bastante material del que tenía por aquí almacenado, sigo teniendo en venta todavía algunas cosas, supongo que pondré algunas más porque total a la mujer no me voy a llevar nada, incluida una televisión de 32 pulgadas que no tiene escasamente ni tres meses de compra.
Una vez que haga esas ventas y que coja todo el material que creo que podrá ser necesario para la el arca de Santi, y un poco de dinero que pueda gastarme en pienso, me llegaré a entregar esas mantas para cuando llegue el invierno, la comida que nunca les va a faltar, y bueno supongo que será mi manera de despedirme de los cuadrúpedos. Porque yo ya no tengo cuerpo ni ganas de tener como compañía un amigo peludo.
Sacaré algunas fotografías de los bichitos y me entretendré a pintarlos mientras hago de las cosas y como luego la vuelta tengo que pasarme otra vez por Monzón, les dejaré un bonito regalo en modo de presente. Qué te parece mi amor? A veces la gente también tiene que recordar porque está luchando.
El primer destino me gustaría que fuera mi Cantábrico. Ese olor amar salvaje que nos quedamos a puertas de poder disfrutarlo, pero que esta vez te llevaré aunque sea metidita en tu urna. Tengo un certificado por lo tanto según Fermín no creo que tengamos ningún problema de poder viajar juntos. Y el que piense que es macabro pues no sabe lo que es el amor.
A la vuelta me gustaría pasar por el valle de Irati. Te acuerdas vida mía de cuando íbamos a por castañas? Pues aunque supongo que estará todo diferente me gustaría parar y hacer alguna acuarelas de la zona. Siempre que cuanto no nos llueva como en aquel día.
E en la siguiente etapa me gustaría pasar por Jaca, no tanto por la ciudad hacia el bullicio, sino por subirme allí arriba ay fuerte, que desde allí hay en las vistas preciosas del valle, inclusive el fuerte tiene su cosa con esos hundimientos protectores.
De allí amor mío iremos a Biescas, pintaremos un poco aquellos maravillosos y frondosos bosques por donde corríamos con el coronel, me niego a hacer la vuelta del río, aún me acuerdo del calor, pero me gustaría acercarme a aquel lugar donde muchos no tuvieron la suerte de salir, y recordarlos ahora a pesar de estar tanto tiempo pasado, porque poca gente se para por allí.
Lo siguiente será nuestro paraíso. Es salir del agujero entrando en la luz más maravillosa, donde si pudiera ser me quedaría unos días pintando los miles de recuerdos que tenemos de aquellos lugares, y sentarme a recordarte por cada rincón.
Ya me supongo que la cartera irá echando humo, así que lo más probable es que la siguiente parada la haga en vespen, porque estoy deseando encontrar aquel Jack Sparrow que me hiciste a punto de cruz para poderlo colgar como corresponde. Ese pudiera ser se vendría conmigo al horno.
Tras aquello volvería a la casa, no tendría que volver a poner otra vez a plan con Fermín, tendríamos que poner en funcionamiento de nuevo el día a día, no sé si habría perdido demasiados kilos en el viaje o no, pero ya hay retomaríamos la seriedad del papeleo, y viendo que Aurora y oscar no necesitan nada más de lo que tenemos ahí almacenado, creo que voy a ir buscando gente que necesite algo especial mi estudio de dibujo por ejemplo todo el material que me quede en venta, haré una pequeña recopilación de obras y las iré regalando a quien te dedique alguna preciosa poesía, y mientras pagamos por ver si me contestan de la chirigota de la comparsa de Martínez Ares, para enviarles el cuadro, y otra idea que he tenido ha sido localizar argüez para agradecerle de corazón y con un dibujo si pudiera ser, la letra de nuestra canción.
Por hoy amor mío el cuaderno de bitácora han sido menos lágrimas pero el mismo dolor. Y es porque ya he aprovechado para tomarme la medicación antes de abrir mi corazón, porque si no me es imposible hablar sin llorar.
Te amo vida mía.
Haremos de esta última aventura algo épico.
Procuraremos marcharnos como vinimos disfrutando juntos.
Hasta mañana amor mío.