peregrinar al templo del arte_cuaderno de Bitácora

Hay quienes caminan cientos de kilómetros disfrazado de fiel. 

Fiel a la bascula y el espejo. Que de esos conozco personalmente unos cuantos.

Los hay que de verdad procesan devoción y se someten a una flagelación  de pasos diarios. 

Que oye! Si de verdad se cumple lo pedido,  a lo mejor tendría que hacer el camino yo también, para llegar con el último extertor a la plaza del Obradoiro. Pero eso no vende fe. No es productivo. Seguramente acabarían sin siquiera respetar mi testamento vital.
Y el seguro se inventaria una muerte extraterrestre por la que librarse de pagar el sepelio de un descrédito religioso. 

Luego estan los fieles de foto y esfuercillo en coche oficial. Esos son los verdaderos valores religiosos que promueven con sus camisitas remojaditas, supliendo el sudor por agua de Vichy.

Yo a mi manera hoy he empezado mi propia peregrinación a la locura. Porque si un fiel habla con un trozo de madera, yo puedo hablar con el recuerdo del amor de mi vida.
 A la que yo si que conocí en persona.
 Besé físicamente sus manos de piel, carne, tendones huesos y amor en cada caricia. Y la ame con cuerpo pensamiento  y alma. Aún salvo por la evidente distancia, amo todo cuanto es y representa. 

Asi que me considero igual de peregrino que cualquiera que busca llegar a un sueño.

Y si tras este peregrinaje consigo lo que anhelo, entonces tomadme de ejemplo y peregrinad por el amor.

Buscadlo y alimentarlo aunque ya no esté con vosotros. A mi me da esperanza. No de vivir. No soy hipócrita. Mi esperanza es que con este peregrinaje, se acelere mi partida y me llene de amor nuevamente,  renovado y fresco,  para llegar oliendo a Cádiz,  a amor y a arte.

Y tras unirnos de nuevo en uno, que el universo nos sea eterno.

Entradas populares de este blog

he decidido irme.

no es cuando yo me vaya. es. que ya me he ido._ cuaderno de bitácora

cuaderno de bitácora. lunes catorce de abril.